Destempladamente FRÍO.

Sol en el cielo; Guantes, bufanda, abrigo y una mirada perdida en los grisáceos tonos del horizonte;

Me encanta el frío aunque, como todo, siempre me acaba aburriendo; Supongo que porque todo el mundo lo asocia al placer de quedarse en casa tirado en el sofá, calentito, sin vida social... pero después de un verano de bermudas, bañadores, cremas solares, insolaciones, litros y litros de cerveza aliviadora de sed, imágenes ridículas de surfistas de medio pelo fardando de yo que sé, noches interminables, cielos estrellados, calor, etc; Se agradece poderte cubrir el cuello con una bufanda, dejar que tu piel se blanquee y los tonos alegres de tu armario veraniego, den paso a pesadas cazadoras, gabardinas, jerseys de cuello vuelto y pantalones de pana;

Evidentemente estoy en pleno cambio de estación; ya no me apetecen ensaladas cuando llego a casa; el helado sabe mejor debajo de una manta y mi gasto de luz se disparará a límites insospechados; Pero, aunque me afecte a la salud, me gustan los cambios; la edad me ha transformado en un culo inquieto que se aburre rápido de casi todo. Descubrir el placer de indagar en lo desconocido me ha vuelto avispado, inconformista y, por consiguiente, infeliz (relativamente) supongo.

El reto de mejorar lo presente es estimulante, pero cansa más de lo debido. Aún me quedan fuerzas de sobra; tengo un corazón incandescente, un gaznate ávido de sabores nuevos y diferentes y grasa suficiente para soportar cualquier tipo de frío polar que se avecine.

Pero teniendo las amarras tan sueltas, corro el peligro de acabar divagando por no sé donde en busca de qué sé yo y con la sensación de perdido que sólo tienen los que han extraviado el miedo a casi todo;

El frío es soportable. Los medios para sobrellevarlo innumerables... pero no sé por que todos eligen el mismo: quedarse en casa, resguardados del diluvio, con miedo a mojarse o a morirse de frío...

Como para vivir en Groenlandia, Islandia, Alaska o en el polo norte;

Vosotros veréis; yo prefiero a esos que se compran un abrigo pesadísimo que abriga la hostia, y cuando entran a un bar se lo quitan y, por debajo, van en mangas de camisa; Yo, personalmente, considero que la bufanda es un complemento que embellece mi figura, me gusta el cuello alto, y la sensación de sostener una taza de chocolate caliente o té entre tus manos heladas;

Supongo que este año, que mi hombro ya está arreglado (toco madera); iré al monte, a esquiar y a todas esas cosas que sólo se pueden hacer en invierno, o que, al menos, gratifica más hacerlas en condiciones climáticas menos agradables; Por ejemplo, vestirse de corto para jugar un partido de aficionados a las 10 de la mañana y a 2 o 3 grados, o el reto de arriesgarse a salir sin paraguas cuando es evidente que esas nubes oscuras no están ahí de adorno.

De alguna manera hay que sobrellevar el consumo de cine en casa de la gente.

Yo me conformo con no tener que visitar a mi médico tantas veces como estos dos últimos años. Lo demás ya irán surgiendo cosas, supongo.

Bueno... y como ayer me adulasteis y vanagloriasteis con mi poema, e incluso me comparasteis con Benedetti, ángel González, el gran Gustavo Adolfo... (luego soy yo el exagerado...), os voy a "premiar" con otra de mis odas al amor. Esta vez al definitivo que he creído encontrar dos o tres veces, pero como sabéis sigo tan sólo, depreciado, despreciado, olvidado y abandonado como siempre;

Esta vez es una parte de la letra de una canción que escribí para alguien que espero conocer algún día, porque no tengo mi documento de poesías a mano, pero me queda mi famosa memoria selectiva:

Se llama: Tú.

Nacido para buscarte,
viviendo sólo para quererte.
He luchado por tenerte y sé muy bien
que la corriente nos conduce...
al mismo lugar...

...

Dos miradas coincidiendo de repente,
dos sueños que parten de una misma herida
Dos vidas, en una sola vida...
dos pasados, un presente;

Me fío, no importa si brilla el sol
ya he encontrado en tu mirada
un placebo aún mejor;
pongo el mundo a tus pies
y detengo si hace falta
el tiempo para ti...

Si queréis más tendréis que venir a verme tocar la guitarrita un día de estos, porque escrito así suena muy ambiguo y extraño; ja ja.

Venga, os dejo arropados con una versión de radiohead "creep" por parte de Echostream; supongo que quien me la recomendó tiene con quien arroparse y si me la propuso es porque algo especial le debe evocar; a mí me suena a invierno, y creo que me espera una estación larga y solitaria en la que perderme entre los tonos grisáceos del horizonte con mis botas, mi bufanda, mis gordos jerseys de lana y con la esperanza de que esa parte de la letra de la canción algún día, no sea aplicable a lo que ahora soy: un escalofrío... una rareza ¿qué demonios estoy haciendo aquí? yo no pertenezco a este lugar... sólo quiero tener el control, quiero tener un cuerpo perfecto, quiero tener un alma perfecta y que te des cuenta cuando no esté junto a ti que me gustaría poder ser tan especial como tú...

Salu2

Nos vemos mañana...

0 comentarios:

Publicar un comentario