De la crisis se sale por la izquierda.

Lo dijo ayer Julio Anguita en la Sexta: "es más cómodo someterse que pensar".

http://andaluciainternacional.es/videos/92-chus/video/918-Salvados+23+de+enero+44+Entrevista+a+Julio+Anguita.html

No creo en la verdad absoluta, ni en las patrias, ni en las banderas, ni en seguir a pies juntillas los dictámenes de mi supuesta ideología. Trato de ser consecuente con mis convicciones, buscando en la autocrítica la base de mis posibles errores. No me da miedo rectificar o reconocer que en algún momento pude estar equivocado y tengo bien claro que, como dijo Calderón: los sueños, sueños son; así que no entiendo que muchos se dediquen a vender utopías a cambio de votos que es a lo que, por desgracia, hemos llegado. No importa prometer lo que no es posible cumplir, no importa mentir, o hacer de la teoría un supuesto al que aferrarse. No importa que los datos no nos secunden... basta con palabrería, con encandilar la inconsciencia de los ignorantes; les sobra pasta para comprar la poca dignidad de los que viven atemorizados por perder las cuatro cosas que aún tienen.

Así nos va...

Anguita dijo ayer que su discurso es tan radical que nadie lo entendería, ni es políticamente "correcto", ni sus ideas venden o quizá sea que es más conveniente no salirse del renglón establecido aunque esa política errónea nos haya llevado al bipartidismo. Si escucho sólo lo que quiero oír, puedo quedarme con que la violencia es un mal necesario o que uno debe estar dispuesto a defender sus ideas hasta las últimas consecuencias, aunque ello te cueste la vida; La liturgia es una cosa... pero cantar la internacional con el puño derecho en alto nada tiene que ver con la realidad que nos atañe y sería estúpido que un comunista (militante) criticara a Fidel Castro o a Chávez. Argumentos suficientes para que lo tilden como le tildan.

La verdad, a veces, te hace perder puntos. Pero el Califa rojo ejerció de político "retirado"y fue sincero (porque, al fin y al cabo, él ya no busca que le voten) e irónico (virtud que le falta a la mayoría de los políticos actuales) al dudar sobre la militancia de izquierdas de los actuales gobernantes o comparando la situación actual con el medievo. Le honra no culpar a Aznar de la muerte de su hijo y criticarle políticamente en vez de ensañarse por lo que su metedura de pata le provocó a él personalmente. Y me gustó que profundizase en la crisis separando la banalidad de lo material y el principio de la solución enfocado a resolver la crisis de identidad sufragada por la falta de ética que la mayoría de los ciudadanos tenemos.

El mercado lo condiciona todo, y ese es el problema; los grandes bancos y las grandes fortunas caricaturizan la democracia. Y sin dar la cara son los ganadores reales de toda elección supeditada al funcionamiento del mercado. Ellos provocan la crisis, ellos se benefician de la misma... hasta ahí todo es lógico: el principio de dinero llama a dinero. Lo raro es que tengan el beneplácito del voto de quien, en realidad sufre las consecuencias de esa crisis. Algo irónico pero premeditado porque el votante, además de elector es un hipotecado con un miedo exclusivo: perder lo poco que tiene. Lo que le deja dos opciones: mantenerlo aunque le cueste renunciar a muchos de sus derechos y beneficios o luchar por el cambio y arriesgarse a perderlo todo.

Es lo que hay.

Ellos tienen la sartén por el mango y nosotros sólo tenemos miedo: tememos que nos despidan, que los precios suban, que los sueldos bajen, que los intereses de nuestros ahorros se desplomen mientras los del crédito que hemos pedido rozan las nubes. Nos da pavor formar parte de las listas del paro y tener que recurrir a las ayudas de Cáritas, tener que mendigar el paro derivado del trabajo que antes hicimos o la subvención por haber contribuido a rejuvenecer la población teniendo un hijo. Nos amenazan con jubilarnos cada vez más tarde y sin asegurarnos que vaya a haber pensiones para nosotros. Nos asustan con las intenciones de los integristas árabes, con la productividad de China, con lo barato que sale hacer las cosas en el Este de Europa, con la supremacía de los "locos " gobernantes de Estados Unidos...

De la crisis se sale por la izquierda; porque ya no nos quedan más cojones que cargarnos lo establecido y empezar de cero; porque somos mayoría los que estamos en una situación, más o menos precaria, los que estando como están las cosas no van a salir de casa de sus padres en su puñetera vida, los que no van a tener un contrato digno y estable nunca, los que se van a ver abocados a renunciar paulatinamente a sus derechos, los que quizá nunca lleguen a jubilarse o a cobrar una pensión, los que no puedan plantearse tener descendencia porque no pueden permitirse comprar pañales... y así todo.

Diréis que soy pesimista, pero no; soy realista y es lo que veo, lo que los datos me demuestran, lo que la incapacidad de los políticos secunda y lo que el desinterés y el egoísmo de una gran parte de la población deja a las claras. Soy pesimista cuando veo las respuestas de algunos jóvenes a las preguntas de Jordi Évole; por que si alguien se preocupa más de colocarse bien las gafapastas, o de la marca de gomina... que de pensar;mal vamos; Decir que la internacional empieza: "cara al sol con la camisa nueva", no saber quien es Mao, confundir a Karl Marx con Groucho Marx, o a Carrillo con Fraga... tiene delito.

Así nos va...

Podemos empezar a luchar ahora o esperar a que la desesperación nos lleve a cometer locuras, a que el hambre nos conduzca a reeditar la revolución francesa, la industrial...

No sé; supongo que el pesimismo y el miedo no son dos buenos argumentos para iniciar ninguna revolución. Yo propongo que veáis la serie que hoy se estrena a las 22h en la primera a ver si se nos pega algo; o que alquileis u os bajéis "Hitler", para ver hasta donde llegaron los alemanes en una situación similar a la que ahora estamos viviendo. O que investiguéis lo que llevó a los franceses a sublevarse contra Luis XVI, o a algunos Castellanos a embarcarse en una aventura "suicida" con un tal Colón, o que escuchéis las batallitas de vuestros padres sobre lo que tuvieron que hacer para conseguir librar los sábados, tener paro, seguro médico, vacaciones, sueldos y condiciones dignas... ¿tan fácil y por tan pocos vamos a renunciar al bienestar?

Debería darnos Vergüenza.

Como dirían los doble V: El milagro es que yo siga aquí para narrarlo, el siguiente paso será morir para el descanso. No es que me guste mucho el RAP, pero a veces entre el ego  y el victimismo hay frases que dan que pensar.

Por cierto, me gusta "No band for lluvia".

Salu2

y nos vemos mañana.