Reconstrucción.


Suena "reconstrucción" de Deluxe, mientras el recogedor auna los pedazos rotos de mi optimismo. Toca recuperar mi gusto por los puzzles y rehacer el idílico paisaje que ha sombreado mis anteriores vivencias. La vida es demasiado corta para pararse a pensar. Ya he perdido demasiado tiempo enjaulado en la desamortización paulatina de mis ilusiones. Quizá por éso he callado estos dos días, porque hay veces que es mejor no decir nada, que llenar la pantalla de retrospectivas oscuras.

Por éso sigo con mi idea de que el primer paso de todos es el convencimiento, y los siguientes: tener claro que la ilusión es imprescindible y que no hay negociación posible con los reveses. Tras las encrucijadas hay un sinfín de esquinas que cruzar. Cada elección es un riesgo, pero las posibilidades de equivocarte son las mismas que las que tienes de acertar. Y por suerte: yo nunca me arrepiento de nada, ja ja. Aunque sí me reconstruyo cada día.

Salu2

y nos vemos mañana.

0 comentarios:

Publicar un comentario