Los laureles del prógimo.

Bonita (y filosófica) mañana de radio... ¿existe el instinto paternal? ¿tiene el mundo arreglo? y, sobre todo: ¿qué enviaríais al pasado?

La solución del mundo está en alguna tertulia de tren, pero nunca llegará a las "altas esferas"... demasiado ombligo para tan poca cabeza; Supongo que el instinto paternal forma parte de la solución, porque no hace falta que los hijos sean tuyos. Lo mejor del cristianismo es que "inventó", o puso de moda, la palabra prójimo: un término medio entre amigo, familiar y desconocido que no muchos labios pronuncian debidamente. Y en cuanto a qué enviaría al pasado, personalmente, yo me llevaría a los fan´s de Jorge Manrique y de su frase "cualquier tiempo pasado fue mejor" y les diría: veis como no era para tanto.

Pasamos demasiado tiempo definiendo cosas, bailando entre el pasado y el futuro y "discriminando" los acontecimientos que pasan a nuestro alrededor. Ser catastrofista es una moda que debería pasar cuanto antes. Las heridas ya no saben a nada. Tanto relamerlas les ha quitado acidez y los vampiros pasarían de largo porque esa sangre ya no es digna de mordisco. Y supongo que el sol, lo veamos o no, está ahí arriba esperando a que lo echemos de menos.

Por suerte, yo soy como uno de esos dibujos animados que tienen su propio sol y su particular nubarrón de las tristezas que derrochan agua para aclararte que, te guste o no, no tienes más remedio que espabilar. Mis penas pueden esperar criogenizadas al lado de Walt Disney. Porque, como decía Tom Peters, hay que tener cuidado con el éxito, porque los laureles de hoy son el abono de mañana. Pero vivir ya es, de por si, un laurel suficientemente aromático.

Salu2

y nos vemos mañana.

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