Un poema y una rosa por Sant Jordi.

Alguien...

Alguien puede apreciar lo que escribes

y no quererte;

Alguien puede escuchar lo que cantas

y no amarte;

Pueden retuitearte, adularte, contestarte...

y no tenerte en cuenta.

Pueden vanagloriar lo que desconocen

y exagerar lo que, simplemente creen,

piropearte por complacerte,

invitarte a un trago, bailarte

abrir su corazón porque es de noche

emborracharse contigo para escusarse,

darte un abrazo, dos besos, acariciarte

o incluso follarte.

Dejarte unos euros, correr contigo

camino al fin del mundo

y sólo acercarse un poco

al otro lado de la esquina.

Alguien puede engañarte o ser sincero

y dañarte con el dolor más intenso:

el que provocan las palabras.

Alguien puede regalarte una rosa

por Sant Jordi, o un libro,

o un sentimiento momentáneo y no envuelto.

Alguien puede hacerte creer que lo perfecto

se pierde en la definición de lo eterno.

Y pueden cambiar el atrezzo,

representar papeles dramáticos o cómicos,

iniciar una guerra para después

restablecer la paz.

Pueden criticar porque saben que duele,

pedir perdón cuando ha dejado de importarte,

reñirte, abrazarte, reinventarlo todo

para destrozarlo, luego,

como una moderna obra de arte...

Hacerte llorar, a veces, otras animarte.

Y tú puedes seguir siendo el mismo,

porque lo importante

no es saber porque lo hacen

si no el efecto que condiciona

que te lo pases bien

o que todo parezca un jodido desastre.

Salu2

y nos vemos...